miércoles, 11 de febrero de 2009

Produce e impulsa esta idea:
Eme Producciones Creativas
Consultora Laboral - Gerenciadora de Proyectos
www.emeproduccionescreativas.blogspot.com



Proyecto: “Programa Soberanía Nativa”

Idea

Promover entre la población general (especialmente descendiente de aborígenes) a conocer y decidir acerca de la facultad que nos corresponde por derecho natural, a poder elegir ser libres, soberanos y responsables de nosotros mismos en todo lo que concierne a la Vida Humana.
Esto incluye el diseño y creación de una organización social nueva (o vieja si se retoma el modelo de la antigua Confederación de Naciones Originarias) y todo lo concerniente a ella.
Será modelar el propio sistema económico, social, político, educativo, de salud, etc., plenamente consensuado por el pueblo. Es decir, una correcta “democracia”.

Motivo

La necesidad de llegar a un equilibrio ante el evidente decaimiento e irreparable quiebre del sistema mundial económico-político-social. Lo que incentivará una mayor problemática social general (falta de empleo, falta de dinero circulante, falta de sistemas de salud, de educación, de fondos para jubilación y pensión, de energía, de combustibles, de alimentos, etc.). Ante esta situación existen dos posturas: una es esperar sin hacer nada y luego ver como nos adaptamos a la supervivencia ambiental; la otra es intentar hacer algo tengamos éxito o no, pues igualmente deberemos tratar de sobrevivir como especie.

Concepto de “Soberanía Nativa”
Definición que recibe el conjunto de preceptos que dan facultad, capacidad o derecho a todo individuo de poder elegir y adherir en forma personal, voluntaria y autodeterminada, a una ciudadanía mas extensa y abarcativa que las divisiones políticas actuales conocidas como “países”, y además, la posibilidad de participar en forma directa en el diseño de las normativas legislativas que den estructuración y forma a la misma.
La Soberanía Nativa será una segunda ciudadanía que se podrá gestionar ante el gobierno del Hermano Evo Morales, por ser descendiente de un pueblo originario del Tawantisuyu y al mismo tiempo, ser presidente de un país comprendido dentro del mismo.
Obteniendo con ello, ciertos derechos y garantías que no gozaría si sólo tuviese la nacionalidad que le otorgara el sistema legal regente actualmente, que es obviamente un diseño separatista del imperio materialista extranjero e invasor.
Además, la palabra “Nativa” remite no sólo al lugar de nacimiento o procedencia de una nacionalidad o de una persona, sino que este vocablo es directa e inconcientemente asociado con “la población originaria” de Awyayala. Al mencionarse “los nativos de Argentina” o “los nativos de Bolivia” en cualquier libro de historia o geografía “oficial”, el lector automáticamente comprende que se hace referencia a los pueblos originarios de este territorio comúnmente llamados “indios”, lo cual deja aclarado explícitamente que se reconoce mundialmente que ellos estaban antes de que existieran las nacionalidades actuales de Argentina, Bolivia o cual fuera, y por esta simple razón se expone que la nacionalidad que hoy tenemos “los sudamericanos” es inventada, ficticia y lo peor de todo: violenta y avasalladora de los derechos propios de los pueblos libres nativos de este territorio, porque no les preguntaron, ni los invitaron a convertirse a una nueva nacionalidad o cultura, simplemente los sometieron por la fuerza, y esto es un precedente suficientemente fuerte para alcanzar el éxito en este cometido de declarar ley a la “Soberanía Nativa”, es decir que la nacionalidad primaria u originaria de Awyayalenses, esté posicionada/jerarquizada con una autoridad e importancia superior que las nacionalidades secundarias y posteriores (históricamente hablando) de argentinos, bolivianos, peruanos u otros.
A partir de esta construcción legal de “países sudamericanos”, se edificó la soberanía del poder legal-comercial extranjero, sobre la supresión de los pueblos preexistentes y la tergiversación del entendimiento y la comprensión de los pobladores futuros, los cuales somos todos los que actualmente estamos contenidos dentro de “los países americanos”.
Quienes hoy, no nos cuestionamos qué es lo que encierra “ser argentino” o “ser boliviano”, no hacemos otra cosa que reforzar y sostener ni mas ni menos que a un gran error. Una gran manipulación de La Verdad y del equilibrio entre: la igualdad de condiciones y el respeto por las diferencias entre los pueblos y sus culturas.
Quien hoy inocentemente se define como argentino, boliviano, peruano u otro, no hace otra cosa que reforzar el racismo, el elitismo y el sectarismo instituido subliminalmente por los dominadores poderosos (materialmente hablando), que originalmente fueron europeos, pero que hoy día no tienen una nacionalidad definida, son simples mercaderes transnacionales que han tenido éxito en el abuso de su ejercicio del poder material, por sobre toda la Vida de la Madre Naturaleza (reinos: mineral, vegetal, animal y humano).

Objetivo Inicial
Solicitamos ser reconocidos como pobladores legítimos del Tawantinsuyu al referente social y político que goza de la facultad para hacerlo, por ser descendiente directo de los pueblos originarios que ancestralmente habitaron la Región de los Cuatro Sectores (Tawantinsuyu) y quién es, a su vez, un legítimo Presidente Nacional, electo bajo la metodología legal-oficial de la política internacional: el Hermano Evo Morales.
Esto, bien puede ser alcanzado bajo un decreto presidencial u otra metodología legal que acredite lo que le requerimos. Además, le ofrecemos el respaldo necesario gracias a la divulgación social y masiva de nuestro petitorio y la correspondiente colecta de firmas sumándose al Proyecto de Soberanía Nativa, para todos los habitantes de este suelo, que opten voluntariamente por la tramitación de una ciudadanía suprema, dado que ofrecerá mayor alcance en lo que respecta a derechos y garantías sociales.

Los objetivos subsiguientes e imprescindibles para alcanzar dicha meta, serán comunicados posteriormente en la medida en que se vayan cumplimentando los pasos previos necesarios.